domingo, 26 de febrero de 2012

Proyecciones Fotográficas. I Sesión. Joaquín Cónsul, Cristina Photo Vintage y B & W.




METOLCUATRO


CRÓNICA de la I  SESIÓN
Proyecciones Fotográficas

CRISTINA PHOTO VINTAGE
Sexo, muerte y espías

JOAQUÍN  CÓNSUL
La fotografía pornográfica
antes de la revolución castrista

B & W
Iconografía sexual y otras pajas mentales
(de David LaChapelle a Roy Stuart)

Sábado 18 de febrero




Fotografía: Autor desconocido



                                                 
Fotografía: Marina Edith Calvo



 Fotografía: Ellen von Unwerth


 Fotografía: David LaChapelle


Fotografía: Roy Stuart





   Con la sala muy concurrida, se inició más tarde de lo previsto, debido a la tardanza de B & W y su cobertura técnica,  la primera de la proyecciones, La pornografía cubana anterior a la revolución castrista.






Fotografía: Constantino Arias



Fotografía: Eve Arnold



Fotografía: Joaquín Blez Marcé



 Fotografía: Constantino Arias


Fotografía: Autor desconocido



   Joaquín Cónsul nos ofreció una erudita información previa. A saber:
     Que lo que no se podía hacer ni mostrar en los cercanos USA, en la primera mitad del siglo XX, se desarrollaba plenamente en Cuba: juego, prostitución y pornografía, y que la pornografía en la isla “funcionó estupendamente”.

    Que se desarrollaron en burdeles, cabarés y estudios fotográficos espectáculos y sesiones de un subido tono. Espectáculos zoofílicos de peligrosa realización en USA, para los cuales se llegaron a importar señoritas de Francia, Bélgica, etc. Y que por tanto, “Cuba representaba el elemento transgresivo que no se daba en la pornografía habitual de los USA”.

   Que los cubanos, y especialmente las cubanas según el maestro Joaquín Cónsul, estaban y están “muy dispuestas y dotadas para los aspectos más emocionales del sexo”.

   Que la calidad de las escenas pornográficas cubanas, y latinas en general,  superaban con creces a las realizadas allende del Caribe USA.

   Que Batista y la Mafia, si no es por Castro, pudieron hacer de la isla un gran casino, un gran plató pornográfico que, a buen seguro, hubiera impedido el desarrollo de Las Vegas y otros lugares especializados en materia oscura.





Fotografía: Autor desconocido




Fotografía: Autor desconocido




Fotografía: Autor desconocido



   Que, en conclusión, la pornografía es territorio que se encuentra al otro lado del espejo y que Cuba presenta una tierra muy fértil. Que la pornografía siempre ha tenido mucho de trasgresión y de estímulo para ejercicio sexual poco cansado. Que la pornografía ya no es monopolio de los pudientes –léase antaño Alfonso XIII y su proveedor, el Conde de Romanones. Que lo que ayer era pornográfico, hoy es estampita publicitaria. Que la pornografía cambia, como los humanos y sus épocas. Y que un reconocido Juez USA, a la pregunta sobre qué es y no es pornografía, vino a decir que si en una obra literaria o plástica es su elemento predominante, pues sí; pero que si era un elemento más en la historia o materia, pues no.

    Para ilustrar La pornografía cubana anterior a la revolución castrista se proyectaron casi cien fotogramas, aderezados con conveniente música. En una primera, se pudo ver cuál era el ambiente de la Habana y aledaños en la década del 50. Calles y cabarés, fundamentalmente.

    En un segundo momento, asistimos a una serie de fotografías de desnudos femeninos. Desde un daguerrotipo, pasando por las de Joaquín Blez Marcé, Constantino Arias, y diversos fotógrafos anónimos. 
   Y por fin, entramos en materia plenamente pornográfica; o sea, jodienda retratada en nostálgico blanco y negro y que abarcó desde finales del XIX hasta años 50.





Fotografía: Autor desconocido





   Acabada esta proyección quedó abierto un animado coloquio.

    Tras una conveniente pausa, Cristina Photo Vintage, con la elegancia que la caracteriza, nos introdujo en Sexo, muerte y espías, a través de las imágenes de dos fotógrafas y dos fotógrafos: Ellen von Unweth, Marina Edith Calvo, Henri Maccheroni y Vladimir Clavijo Telepnev.


   Para Cristina Photovintage, Marina Edith Calvo representa una manera de captar la muerte sorprendente y elegante. Las imágenes dan fe de ello. 






Fotografía: Marina Edith Calvo



Fotografía: Marina Edith Calvo



Fotografía: Marina Edith Calvo




   Ellen von Unweth, nos muestra un erotismo multisex muy depurado a través de la moda y la publicidad.



Fotografía: Ellen von Unwerth




Fotografía: Ellen von Unwerth




Fotografía: Ellen von Unwerth




Fotografía: Ellen von Unwerth




   Henri Maccheroni es sexo tan directo que no parece sexo, ya que su manera de encararse con la puerta femenina le hace parecerse más a un científico o a un ginecólogo jubilado de la perversidad.




Fotografía: Henri Maccheroni




Fotografía: Henri Maccheroni




Fotografía: Henri Maccheroni





     Y Vladimir Clavijo Telepnev, que tiene algo de fotógrafo decimonónico, en ese juego constante de ser una prolongación del literato y capturador de imágenes que fue Lewis Carroll y algún que otro pornógrafo de la época de la fotografía a partir de un negativo sobre vidrio al colodión.




Fotografía: Vladimir Clavijo Telepnev




Fotografía: Vladimir Clavijo Telepnev




Fotografía: Vladimir Clavijo Telepnev




Fotografía: Vladimir Clavijo Telepnev




Fotografía: Vladimir Clavijo Telepnev




Fotografía: Vladimir Clavijo Telepnev




   Cristina Photo Vintage nos manifestó, durante la proyección y el coloquio, que su militante gusto por lo antiguo. Ella se nutre de la nostalgia, pues como dijo: “Cuanto más antiguo, mejor”. Y añadió, tras una pregunta de una espectadora: “No, no me ha costado mucho reunir estas fotos; forman parte de mi archivo personal… Mi criterio de selección es muy simple. Tienen que ser fotos que a mí me conmuevan, por encima de la técnica”.


   Y finalmente, tras la conveniente pausa durante la que los asistentes hablaron de fotografía y diversas materias, B & W pasó a presentar su proyección: Iconografía sexual y otras pajas mentales (de David LaChapelle a Roy Stuart).

   Sobre David LaChapelle nos informó que es fotógrafo reputado y retratista de gente famosa, con claro lenguaje publicitario, artista para moda subida de tono y color, además de autor de carpeta de discos y CDs. También nos contó que había nacido en 1969 (Connecticut/USA). Que descubrió el poder de la imagen fotográfica un día, a los nueve años, que estaba con su mamá en una piscina de Puerto Rico. Que mamá vestía bikini, muy guapa ella bebiendo champán. Que, click-click, le hizo unas fotos y que quedó fascinado. Y que desde ese momento hasta ahora ha facturado un montón de fotos.






Fotografía: David LaChapelle




Fotografía: David LaChapelle




 Fotografía: David LaChapelle



Fotografía: David LaChapelle




Fotografía: David LaChapelle




Fotografía: David LaChapelle



   De Roy Stuart nos dijo B & W que nació en Nueva York en 1955. En su juventud estuvo vinculado a grupos artísticos radicales, antimilitaristas, dados a las experiencias libertarias en asunto de ideas, drogas, sexo y demás. Vamos, una gente maldita y convenientemente perseguida. Harto de marginaciones, se traslada a Londres y, finalmente, a París, donde reside.




Fotografía: Roy Stuart



Fotografía: Roy Stuart



Fotografía: Roy Stuart


Fotografía: Roy Stuart



Fotografía: Roy Stuart




    En medio de la proyección, Indira Sinfín le preguntó que cuál de los dos fotógrafos le gustaba más. A lo que B & W respondió: “Por la estética, me identifico más con Roy Stuart, aunque reconozco que sus montajes son teatrales, con chicas muy seleccionadas. Mezcla la estética europea con el rollo americano de hacer fotos en los hoteles, cosa que ahora se hace mucho… A mí me gustaría que lo hiciera de verdad, sin teatralización; pero eso es muy complicado”.

   Después también nos dijo: “LaChapelle trabaja en un plano, acumulando un montón de cosas. Sin embargo, Roy Stuart trabaja con la perspectiva para hacernos creer que está fotografiando un hecho real. Hay obstáculos delante, como farolas, muebles y demás. Pero después de que has visto unas cuantas fotos suyas, acabas descubriendo el truco… La verdad no es que me guste más uno que otro. Son diferentes. LaChapelle retrata bien lo irreal, lo desmesurado. Recrea muy bien el mundo del comic. En cambio, Roy Stuart recrea con calidad el hecho real”.



Fotografía: Roy Stuart



Fotografía: Roy Stuart



Fotografía: Roy Stuart




    Y finalizada la sesión los asistentes reanudaron la animada charla y otros movimientos. También se hicieron divertidas y curiosas fotos. Pero este no es el momento y lugar para dar muestra de ello. Con el tiempo y las convenientes autorizaciones, se dará fe visual de dichas fotos e, incluso, se acometerá una proyección en los parajes de Metolcuatro.


   Sólo anunciarles que el próximo sábado 24 de marzo, a las ocho de la tarde, tendrá lugar la II Sesión de las Proyecciones Fotográficas. Para ello contaremos con:


Mayte Pañeda

El Londres de las 60.

David Bailey
Terence Donovan
Brian Duffy

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Cristina Photo Vintage

Sally Mann

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Mamen Uz. Autofotos

Flores en la Tierra
y
Humo Rojo

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